Un cuento para irnos a dormir

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La semana pasada se conmemoró el día internacional del libro infantil, recordando y celebrando, el nacimiento de Hans Christian Andersen autor  de cuentos como  La Sirenita, La Vendedora de Fósforos, el Patito Feo y muchos otros. Tales historias nos llevan al siglo XIX,  si nos ponemos a reflexionar nos percataremos, que cada uno de estos cuentecitos tocan la fibra sensible de aquella parte en el ser humano que no cambia con el paso de los años. Para prueba un botón, historias que encajan en los sucesos de los tiempos actuales.

El Pacto por México es como las habichuelas mágicas, una enorme planta, que llega a tocar el cielo, que esconde un gran tesoro, oro, riqueza, poder.  Pero si existiera el gigante malvado, quien tiene los beneficios del poder político y la supremacía de los acuerdos. ¿Qué pasaría si alguien da un corte al tallo, o está por su propio peso se derrumba?

La espada en la piedra y el mago Merlin Miguel Ángel Osorio Chong, o perdón el fragrante Secretario de Gobernación, quien como la conciencia de Pinocho, perdón ya me equivoque de cuento, de Enrique Peña Nieto  el presidente,  a la mentirosa maestra Elba Esther Gordillo a la cárcel fue a dar, y sustituyéndola con su abra cadabra, surgió Juan Díaz de la Torre.

El Presidente del CEN Gustavo Madero, es como ese venadito, cierto Bambi,  solo que mal soñó ser el rey del reino blanquiazul, el lío fue que le mataron a su gallina o su mamá en las elecciones nuestra querida Chepina, después se incendió el bosque, todos los animales huyeron y está en espera de un final feliz, eso si no es que le quitan el papel protagónico antes del final de la historia.

El patito feo, los que creyeron que la Reforma de Telcom, podría servir para abrir más canales de televisión y luchar contra el gran cisne que aún sigue siendo Televisa. O porque no hablar de la Reforma Educativa, los maestros huelguistas de Guerrero y Oaxaca que no quieren que se promulgue pero a todas luces buscan que se les cumplan sus caprichos.

Espero no herir susceptibilidades, pero aquí les dejo estos tres cuentos y ustedes hagan el trabajo sucio: Los 3 Cochinitos, la sirenita o La Ratita Presumida, ¿A quien le quedarían?

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