Carta a mis compañeros

Por Nohemí Sánchez Blanco

24-06-2016- Supongo que este debe ser un discurso de despedida, pero yo quiero hablar de las estrellas.

Y esta es la definición de una:

“Una estrella (del latín stella) es todo objeto astronómico que brilla con luz propia; aunque en términos más técnicos y precisos podría decirse que se trata de una esfera de plasma que mantiene su forma gracias a un equilibrio hidrostático de fuerzas. El equilibrio se produce esencialmente entre la fuerza de gravedad que empuja la materia hacia el centro de la estrella, y la presión que ejerce el plasma hacia fuera, que tal como sucede en un gas, tiende a expandirlo. La presión hacia fuera depende de la temperatura que en un caso típico como el del Sol, se mantiene con la energía producida en el interior de ella. Este equilibrio seguirá esencialmente igual en la medida de que la estrella mantenga el mismo ritmo de producción energética. Sin embargo, este ritmo cambia a lo largo del tiempo, generando variaciones en las propiedades físicas globales del astro que constituyen parte de su evolución.”

Fascinante ¿no es así?…pero esto no es todo lo que quiero decir acerca de ellas. Sé que las estrellas son un gran cliché, pero ¿cómo no quedar impresionados por ellas? Pensémoslo en el sentido metafórico, para esto, pongámonos en el lugar de una estrella. Para comenzar, somos un objeto astronómico que brilla con luz propia, ¿saben lo que significa esto? No necesitamos de nada para irradiar luz, simplemente porque nosotros mismos somos luz. Mantenemos la forma gracias a un equilibrio de fuerzas: la fuerza de gravedad y la presión. La fuerza de gravedad que actúa como todas las cosas externas, todo lo que nos rodea (familia, amigos, ambiente y lo que implica estar rodeados por ellos –experiencias de tristeza, felicidad, angustia, emoción, etc.-) y la presión, que actúa como la respuesta a estas situaciones, todo lo que somos y expresamos. Esto depende de la temperatura, que se mantiene con la energía producida en el interior (básicamente nuestra fuerza para sobrellevar las situaciones y no dejar que nos afecten). Este equilibrio seguirá igual en la medida en la que mantengamos la producción de energía, pero ustedes y yo sabemos que esto es prácticamente imposible, simplemente no se puede estar siempre feliz, irradiando alegría y paz, es normal que nos sintamos mal, cansados y que sintamos que el mundo se nos viene encima, este ritmo cambia a lo largo del tiempo generando variaciones en las propiedades del astro.

Sólo debemos saber que nuestra energía no se irá, simplemente se va a transformar, nuestra luz estará en constante cambio, evolucionará, algunas veces brillaremos como si nuestra luz llegara hasta la galaxia más lejana, alumbrando todo lo que se te interponga y dando luz a lugares que nunca habían visto antes; otras veces nuestra energía necesitará de un cambio en la materia haciendo que la luz se opaque por un tiempo, sabiendo que este cambio nos hará brillar como antes o tal vez más.

Por lo tanto podemos decir que somos una estrella evolucionando, estamos cambiando de materia y nos preparamos para otro ciclo de luz. No puedo decir que será por siempre, porque nada lo es, pero somos una estrella ¿no? Aunque nuestra luz se haya extinguido, el rastro que dejamos será visto o más bien recordado por millones de años más, que creo que esto bastará, al menos para la humanidad.

Una forma de ser recordados es por medio de la comunicación visual, por eso decidimos hacer un mandala que significa Círculo Sagrado. es un símbolo de totalidad, unión, integración; el absoluto.

Un mandala es básicamente un círculo, es la forma perfecta, y por ello representa el cosmos y la eternidad. Representa la creación, el mundo, Dios, el ser humano, la vida. Podríamos decir que todo en nuestra vida posee las formas del círculo. Desde el universo (el sol, la luna, nosotros: las estrellas) hasta el esquema de toda nuestra naturaleza, los árboles, las flores, entre otros. Todos siguen una línea circular. Todo lo que nos rodea tiene la forma de círculo, que al mismo tiempo representa los ciclos infinitos de la vida.

Cada parte del mandala esta compuesta por puntos, que al unirse forman figuras extraordinarias, pero lo esencial no son las figuras creadas, sino el proceso, como dice Steve Jobs: “No se pueden conectar los puntos mirando hacia delante; sólo podemos conectarlos mirando hacia atrás. Por eso, tenemos que confiar en que los puntos se conectarán de alguna manera en el futuro. Tenemos que confiar en algo – en Dios, en el instinto, destino, vida, lo que sea – porque creer en que los puntos se conectarán a lo largo del camino nos dará la confianza para seguir a nuestro corazón, incluso cuando nos lleva lejos del camino más usado. Eso marcara la diferencia.” Esta diferencia es la luz que proyectamos.

Sólo me queda desearles lo mejor, porque sé que la universidad es solo la ruta que nos guiará, nosotros hacemos todo lo demás.

¡Gracias por compartir un poco de su luz durante el tiempo que hemos convivido! Y gracias a todos los que nos han apoyado y aportado su esencia para hacernos las estrellas que somos hoy.

And last but not least: “Listen to the mustn’ts, child. Listen to the don’ts. Listen to the shouldn’ts, the impossibles, the won’ts. Listen to the never haves, then listen close to me… Anything can happen, child. Anything can be.

― Shel Silverstein