¿Alguna vez ha sentido que “le enamora” un lugar?

 

Reflexiones Valiosas.- Digamos, una ciudad como París, un bosque, una estruendosa cascada; o una florecilla que se ha abierto paso en terreno inapropiado; la presencia de un ave que se acerca a su ventana en ciertos momentos de su vida… Y que todas estas situaciones le hacen reflexionar acerca de sus sentimientos y moldean sus pensamientos.
Bien, ese estado de conexión, es una sensibilidad de la que fuimos dotados y que, al trajín de la vida y las exigencias sociales, se va perdiendo para ocupar la atención en otras cosas.
En el ámbito del arte, en la Alemania del S.XIX, la explicación de esta conexión se describió como “un viaje emocional hacia la cosa observada y de regreso la explicación de lo sentido”. Einfühlung, fue la palabra creada y que, al español, la expresión “sufrimiento” es lo que más se le parece, en el sentido de lo que se recibe y afecta nuestro sentir.
Mire usted, la palabra “pasión” es representativa de la parte no-activa de la acción, es decir, “lo que se recibe”.
Así, Einfühlung, es esa cualidad del sentir humano para percibir lo que “a simple vista no se ve”. Una sensibilidad un poco más allá de lo ordinario. Y aún más, la habilidad para expresarlo.
La naciente Psicología del S.XX, encontró en la raíz griega “pathós” una similitud de la que hizo toda una ensalada que concluyó en la hoy famosa y no bien ponderada palabra “empatía”, con un enfoque de “ponerte en el lugar de otro” y, como decmimos en México: “pa’que vea lo que se siente” y peor aún, sensación empleada como tamiz de juicio para rechazar aquello que “no nos cuadra” y hasta exigimos que los demás sean empáticos con nosostros; cuando, como la lealtad, no son cosas que se exigen, sino que se ofrecen como principio de amistad.
Amig@ lector. La empatía de fondo, es el Einfühlung (“ainfilung”), palabra que compare raíces con “feeling” -del inglés- que representa al “sentimiento”.
Bien, recuerde que la clave del Einfühlung está en la habilidad de no sólo el sentir, sino en traducirlo, “narrar el viaje” Ese viaje de sentimientos que se emprendió hacia lo observado. ¡Eso es el arte!
Así, en términos para todos, Juan Gabriel, nos narra todo su sentir en su más icónica canción: “Amor eterno” donde expresa lo más valioso de su vida, su mamá; a quien, lejos de guardarle un resentimiento por el abandono a sus tiernos cinco años, volvió a verla muchos años después, llevándola de paseo a Acapulco para cumplirle un sueño. Basado en el Perdón, nos dice cómo es “el más triste recuerdo” que tiene de esa ciudad y, que además le expresa Su Amor Eterno.
Finalmemente, amig@ lector, la empatía es una oportunidad para perdonar y, al parecer, la mejor manera de expresarlo, es el arte. Por eso, todos tenemos de poeta y loco, un poco.
Como siempre, reciba un abrazzo de su amigo, Ulises Franco
Ah, usted perdone lo que le haya hecho sentir este breve viaje, tradúzcalo en el arte de amar. Ahora sí, ¡Hasta la próxima!
@seguidores @destacar

Ver menos

Deja una respuesta